Otro punto clave que diferencia a una empresa próspera de una que no lo es, es el color. La energía es luz y la luz se proyecta en color, dándole a cada elemento una personalidad propia y hermosa. Del mismo modo que sucede en la naturaleza, el color configura la armonía de una empresa y le otorga un determinado prestigio.
El color debe plasmarse como nexo de armonía entre la propietaria del centro, su propia empresa, su ubicación y su función.
Para facilitaros la detección del color que es uno de los aspectos más dificiles de detectar os voy a recomendar que sigais una serie de pautas simples que os facilitaran esta labor.
1. Cuanto más fría es la zona, más cálido debe ser el color.
2. Hay que descartar los colores fríos y oscuros. Para ello es mejor seguir las pautas de la propia naturaleza en cuanto a matices.
3. Los colores deben estar integrados en su propia zona y destacar suavemente, con elegancia.
4. Se debe buscar un equilibrio entre el color propio de la propietaria del centro, junto con su empresa y por supuesto con la zona en que esté ubicada.
5. El color debe matizarse en armonía, sin brusquedad. En una estancia se puede utilizar diferentes matices de un color para crear la armonía perfecta, en cambio una tonalidad brusca puede romperla por completo.
Cada persona mantiene sus propias preferencias en cuanto a color y debe tener en cuenta si es Yin o Yang. Una personalidad Yin, necesitará compensar su Yang y por lo tanto necesitará estímulos de colores calientes, para no fatigarse. En cambio una personalidad Yang, necesitará compensar su lado Yin y precisará de estímulos de color frío para calmarse. De esa forma son Yang los colores calientes rojo, naranja, amarillo intenso, rosa, lila, marrón, beige. Son Yin los colores más fríos, azul, verde, gris (al 50% Yin y al 50% Yang). No es aconsejable utilizar los colores blanco o negro, porque aglutinan o carecen de la proyección lumínica precisa.
Además es importante para acertar plenamente con el color perfecto, conocer el elemento propio de cada persona. Cada elemento tiene a su vez unos matices característicos de color.
En el siguiente esquema podréis averiguar fácilmente el color adecuado además de conocer los elementos Feng Shui más acordes con cada personalidad.
Ejemplo: Una persona tímida, introvertida delgada, que ha nacido en un año finalizado en 0 o en 1. Le correspondería una serie de tonos suaves y cálidos como amarillo pastel, salmón suave, beige, crema, tostado suave, naranja pastel etc. Los adornos de su centro, como algún tipo de mobiliario o el logo, debería tener matices metálicos. (oro, o bronce). En cambio una persona extrovertida, audaz, activa, nacida en años terminados en 0 o en 1, debería utilizar tonos fríos y suaves como azul pastel, azul mar, verde pastel, verde pistacho, gris perla. Los adornos o algún tipo de mobiliario incluso el logo, debería tener motivos metálicos (plata y cromo).
En el siguiente artículo hablaremos de "Elementos e higiene Chi".
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